Stephan Jung trata en su pintura de las formas de abstracción en relación con las Nuevas Medias. Él parte del convecionalismo de que toda imagen, sea en movimiento o estática, es abstracta.

Para percibir una imagen como tal, el espectador necesita una traducción, necesita poder relacionarla con algo ya conocido o con un hecho de la realidad, con su propia experiencia atesorada, para así descifrarla. Sólo entonces la imagen es percibida como una reproducción de la realidad.

Para el artista, una reproducción animada por ordenador es la primera línea, una abstracción, una disolución de elementos pequeños, pequeñísimos, imperceptibles a nuestra mirada. Stephan Jung cree que esto supone un engaño del ordenador a nuestra percepción. En sus trabajos él intenta disfrazar este engaño y quiere llevar esta imagen engañada que nosotros tomamos de la realidad, otra vez a su origen. La transformación que Jung ejerce es subjetiva.

En la muestra Stephan Jung expone varios lienzos nuevos que conllevan este tema de la descodificación.