Con motivo del inicio de la temporada artística en Madrid, concentrada bajo el evento conjunto de Apertura, la Galería Heinrich Ehrhardt presenta la quinta exposición individual de Günther Förg. A diferencia de las anteriores, no se trata de una muestra de obra reciente, sino que en forma de homenaje, propone una mirada insólita que recrea el contexto en el que fueron creadas, construyendo así nuevos itinerarios de percepción y análisis acerca del lenguaje de su obra.

A través de cuatro gabinetes en los que se ha organizado la galería, cada uno de ellos pintado en uno de los grises pertenecientes a la paleta arquitectónica de Le Corbusier, se distribuyen distintas series de pinturas, esculturas y obra sobre papel realizadas entre finales de los años ochenta y épocas más recientes. La exposición consta de varias pinturas, acrílicos sobre lienzo y madera de trazos sinuosos y composiciones flotantes que, remitiendo en parte al trabajo de determinadas figuras del Expresionismo Abstracto norteamericano, avanzan la forma de la trama o la red característica de su obra posterior de la cual también se muestran extraordinarios ejemplos. Ocupando el resto de gabinetes encontramos además de una inédita obra sobre papel cuya malla de color encuentra paralelismos en las incisiones de una escultura de bronce con la que dialoga, cuatro piezas de yeso con materiales encontrados combinados con un lienzo pintado con tiza que revelan los sedimentos de lo informe y lo indomesticable de su obra.